Recorriendo…
De nueva cuenta las lluvias registradas la tarde noche del jueves en Canatlán volvieron a intranquilizar a los vecinos de conjuntos habitacionales, ya no solo a los que se ubican a un costado de ríos y arroyos, sino también cerca de cerros y laderas.
En el caso del fraccionamiento magisterial Soledad Álvarez, de nueva cuenta el dios Tláloc, Chaac, Chalchiuhtlicue, Pitao Cocijo, Dzahui, Metzabok, Yuku, Huracán y demás divinidades de la lluvia se hicieron presentes, exhibiendo la deficiencia que se tiene a la hora del desagüe de las aguas, que buscan la parte más baja y llegan a viviendas.
Pese a ello, son mucho más los beneficios que estos meteoros traen a la sociedad, sobre todo en el tema de la recarga de los mantos freáticos y el respaldo para las actividades agropecuarias, bajando los costos de producción y ayudando a que maduren de mejor manera los cultivos.
Mucho se ha escrito sobre las deficiencias y falta de obra en lo que se refiere al tratamiento de las aguas de lluvia, sin embargo, también debe citarse el hecho de que a partir del año 2022 se realizaron desazolves y fortalecimiento de bordos, tanto en arroyo Mimbres como en el río La Sauceda.
Pero el municipio no solo es Canatlán ni tampoco los tan multicitados fraccionamientos, sino comunidades como Ricardo Flores Magón y San José de Gracia, donde se tuvo acumulación de agua y arrasamiento en algunos casos.
El incumplimiento de compromisos gubernamentales, como el hecho por el entonces Gobernador José Rosas Aispuro Torres, de construir un muro de mampostería junto al arroyo Mimbres, lo que atestiguó la alcaldesa en turno Dora González Tremillo, son parte de una cultura política que tiende a formarse como una costumbre.
A esperar la construcción o terminación de colectores pluviales y en el caso de la sociedad, a participar en las actividades preventivas cotidianas, como el evitar llenar de basura la calle y en consecuencia las alcantarillas, así como el que las organizaciones vecinales sean vigilantes permanentes de los trabajos de limpieza de éstas, para que cuando llegue el agua, fluya de la mejor manera. A esperar para comentar.