DE LA INTELIGENCIA ARTIFICIAL
PARTE DOS DE DOS
José Noel Pérez Salais
Continuando con el apasionante tema de la Inteligencia Artificial (IA), tenemos que los teléfonos móviles smartphones, prácticamente están inmersos en esta inteligencia, no de ahora, si no desde hace tiempo.
Para ejemplo tenemos que los programas de traducción de idiomas, basados tanto en texto escrito como oral, recurren a la inteligencia artificial para proporcionar y mejorar las traducciones.
Aunque los coches autónomos aún no son una realidad generalizada, los vehículos ya usan funciones de seguridad impulsadas por IA. Por ejemplo, la Unión Europea ayudó en la financiación del sistema de asistencia a la conducción basado en visión VI-DAS, que detecta posibles situaciones peligrosas y accidentes.
Los sistemas de inteligencia artificial también pueden ayudar a reconocer y luchar contra los ciberataques y otras amenazas en línea basándose en los datos que reciben continuamente, reconociendo patrones e impidiendo los ataques.
La IA se ha usado en las cámaras termográficas instaladas en los aeropuertos y en otros lugares. En medicina, puede ayudar a reconocer una infección de los pulmones a partir de una prueba llamada tomografía computarizada. También se ha utilizado para proporcionar datos para rastrear la propagación de la enfermedad.
Algunas aplicaciones de la inteligencia artificial pueden detectar noticias falsas (fake news) y desinformación al extraer información de las redes sociales, buscar palabras sensacionales o alarmantes e identificar qué fuentes en línea se consideran autorizadas.
El potencial de la IA para transformar casi todos los aspectos de nuestras vidas y de la economía aún está por descubrir, pero algunos ejemplos de tecnologías que ya están en marcha o que pronto podrían estar a nuestro alcance son los siguientes.
Hace algunos días Bill Gates compartió en su blog, Gates Notes, un artículo titulado “The Age of AI has Begun”, en el que explora cómo la inteligencia artificial revolucionará diversos campos. En particular, explica cómo la educación se transformará con la IA.
Según Gates, la IA puede ayudar a los maestros y administradores de muchas maneras. Un ejemplo es la evaluación de la comprensión de un estudiante sobre un tema y ofrecer asesoramiento para la planificación de carreras.
También señaló que los maestros ya usan herramientas como ChatGPT para dar comentarios sobre las tareas escritas de sus estudiantes.
Sin embargo, Gates advierte que la IA necesita mucho entrenamiento y desarrollo para poder entender mejor cómo aprende cada estudiante y qué los motiva. Incluso cuando la tecnología sea perfecta, Gates señala que el aprendizaje seguirá dependiendo de las buenas relaciones entre estudiantes y maestros. La IA mejorará la enseñanza, pero nunca reemplazará el trabajo conjunto en el aula.
Por otra parte, para mitigar el impacto negativo de la inteligencia artificial, es importante tomar medidas para garantizar que la tecnología se utilice de manera responsable y ética, entre otras:
Fomentar la transparencia y la responsabilidad en el diseño y el uso de la IA y desarrollar políticas y regulaciones que protejan los derechos y la privacidad de los usuarios.
Aun falta mucho por descubrir en materia de IA, y con un uso responsable la humanidad podrá avanzar en su desarrollo tecnológico, aunque su uso irresponsable pondrá en peligro la convivencia humana y caerá en la decadencia.