Prohibamos ya la tortura disfrazada de terapia: Diputado Martín Vivanco.
Durango, Dgo.- El diputado local por Movimiento Ciudadano, reiteró el llamado a prohibir las mal llamadas terapias de conversión en Durango, solicitó el diputado Martín Vivanco, integrante de la fracción parlamentaria de Movimiento Ciudadano
En el marco del Día Internacional de la Diversidad Sexual, el diputado local por Movimiento Ciudadano, Martín Vivanco, alzó la voz en tribuna del Congreso del Estado para conmemorar esta fecha clave en la lucha contra la discriminación por orientación sexual e identidad de género, y reiteró el llamado a sus compañeras y compañeros legisladores para aprobar la iniciativa que prohíbe los llamados Esfuerzos para Corregir la Orientación Sexual y la Identidad de Género (ECOSIG).
“Ya lo he dicho y lo reitero: las terapias de conversión son una forma de tortura moderna. Implican querer cambiar a una persona en contra de su voluntad, y eso es inaceptable. Nos ha llevado a normalizar la barbarie en muchos niveles”, dijo en su pronunciamiento.
Hace unos meses presente la iniciativa para reformar el Código Penal y la Ley de Salud del Estado de Durango, con el objetivo de prohibir y sancionar cualquier intento de “corregir” la orientación sexual o identidad de género de una persona, recordó el legislador.
Existe un consenso amplio entre las fuerzas políticas para aprobar esta medida y exhorto respetuosamente a que sea votada antes de que concluya el periodo legislativo actual, agregó.
“Esta iniciativa no solo busca erradicar prácticas violentas. Envía un mensaje claro: en Durango no toleraremos que se atente contra la dignidad humana. Vamos hacia un México más igualitario, más inclusivo y libre de discriminación”.
Las modificaciones planteadas establecen penas de dos a seis años de prisión y trabajo comunitario de cincuenta a cien horas para quienes practiquen, impartan, financien u obliguen a terceros a recibir ECOSIG. Además, contempla la suspensión del ejercicio profesional por hasta tres años a quienes promuevan o realicen estas prácticas dentro del ámbito de la salud.
Estas prácticas han sido contundentemente rechazadas por organismos internacionales como la Organización Mundial de la Salud (OMS), la Asociación Mundial de Psiquiatría y la Asociación Americana de Psicología, quienes coinciden en que “no hay nada que curar”.
“Que nadie sea discriminado por ser quien es. Todos los derechos para todas las personas”, destacó Martín.